Tiramisú receta fácil y rápida
Aunque no es un postre con muchos años en los libros de recetas, está muy extendido por todo el mundo.
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Proviene de Italia y está compuesto por ingredientes que sirven para elevan el ánimo de cualquier persona, por eso su nombre: Tiramisú.
Al investigar los orígenes de este postre frío, veréis la típica vuelta y vuelta de supuestos orígenes.
Sin embargo, algo está claro: le debemos este postre a los italianos.
El ingrediente principal de esta receta es el queso mascarpone. Originario de la región de Lombardía, ubicada en el noroccidente de Italia.
Las galletas que se utilizan en su preparación, los savoiardi, provienen de la tierra histórica de Saboya, también en Italia.
Los savoiardi se conocen en Italia como biscotti savoiardi. En Inglaterra se les llama lady fingers. En España los podéis encontrar como bizcochos de soletilla.
Ahora, veamos qué necesitáis para hacer tiramisú casero de ensueño.
Ingredientes
- 250 g de queso mascarpone
- 200 ml de café frío
- 3 huevos
- 4 cucharadas de azúcar
- Galletas savoiardi o bizcochos de soletilla
- Ron o licor de café
- Cacao en polvo puro
Preparación
En un plato hondo, vamos separando las claras de los huevos.
Colocamos las yemas en un recipiente hondo y añadimos el azúcar. Con unas varillas manuales, batimos las yemas con vigor hasta obtener una crema suave y homogénea.
En un bol limpio, colocamos todo el queso mascarpone a temperatura ambiente. Con una batidora eléctrica, batimos el queso hasta eliminar todos los grumos.
Vamos añadiendo, poco a poco, la crema de yema con azúcar con el queso mascarpone. Paramos de batir al obtener una mezcla homogénea.
Agregamos un chorrito del licor de nuestra preferencia y reiniciamos el batido. Al mezclar bien, reservamos en el frigorífico.
Tomamos las claras de huevo y las montamos a punto de nieve. Al conseguir el punto deseado, añadimos una pizca de sal y batimos un poco más.
Incorporar esta crema a la preparación que habíamos reservado en el frigorífico.
Para disminuir la pérdida de aire que aportan las yemas montadas, debemos incorporar haciendo movimientos envolventes y detenernos cuando todo esté homogéneo.
Al finalizar el proceso de unión de las dos preparaciones, almacenamos en el frigorífico.
En un plato hondo, vertemos el café y le agregamos un chorrito del licor escogido para la receta.
Esta mezcla nos servirá para mojar los savoiardi antes de utilizarlos.
Dependiendo del tamaño del recipiente donde haréis el tiramisú, deberéis cortar las galletas para que se ajusten al recipiente. Lo ideal es utilizar un envase que permita colocar los savoiardi enteros.
Pasamos las galletas por la mezcla de café para que absorban todo su sabor. Dejamos escurrir el exceso de café y colocamos un piso completo en el bol donde se preparará.
Luego de tener toda la base del molde cubierta con savoiardi colocamos una capa de crema de queso mascarpone.
Repetimos el mismo procedimiento dos o tres veces más.
El proceso es sencillo: Una capa de savoiardi mojados en café y una capa de la mezcla de queso mascarpone.
Iniciamos con una capa de bizcochos, la última capa debe ser de queso mascarpone.
Para cerrar la preparación, espolvoreamos cacao en polvo sin azúcar sobre la capa superior de mascarpone.
Dejamos reposar en la nevera por algunas horas. Nuestro consejo es mantenerlo en el frigorífico, al menos, por una noche completa.
Sustituto del queso mascarpone
Aunque el queso mascarpone es un elemento fundamental en la receta de Tiramisú y se puede encontrar en el supermercado, es posible que necesites sustituirlo.
El uso de otro queso cambiará el sabor de la receta, pero no dejará de estar divino.
Para la preparación de queso mascarpone se utiliza queso crema con ácidos: tartárico y cítrico.
Una opción para sustituir el mascarpone es utilizar queso crema. Aunque el último es menos grasoso y más ácido, podéis unirlo a otros ingredientes para que el sabor se asemeje más al mascarpone.
Para ello, tomamos 225 gramos de queso crema y lo colocamos en un bol. Para mejorar su manejo, el queso debe estar a temperatura ambiente.
Agregamos un cuarto de taza de crema para batir y dos cucharadas de mantequilla sin sal.
Con varillas eléctricas, batimos hasta que se unifiques los tres ingredientes en una especie de crema.
Se reserva en el frigorífico para extender su vida útil.
Esta receta de sustituto para mascarpone se puede emplear en la preparación de tiramisú. También podéis emplearlo en recetas que tengan este queso dentro de sus ingredientes.
Consejos para preparar tiramisú
Como de costumbre, os damos algunos de los mejores consejos para obtener un tiramisú italiano digno de una pastelería romana.
- Para obtener un postre firme con mayor sabor es necesario dejarlo reposar en el frigorífico. Después de 24 horas todo sabrá mejor, después de 48 será inmejorable.
- El licor se puede sustituir por ron, coñac o el licor de vuestra preferencia.
- Con el café no importa si es descafeinado o no. Lo que sí importa es que sea realizado con un café de calidad, solo así obtendréis el sabor que buscáis.
- El cacao que se utiliza para espolvorear sobre la tarta no debe contener azúcar. No hará falta, pues se equilibrará con el azúcar que aporta el postre.
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